Ella

Me encanta, ella, su sonrisa, cada palabra que sale de su boca, su personalidad, podría seguir así el resto del día, pero no es plan de presumir, jeje. Quiero volver a tenerte, a ser tuyo y tu mía, que los celos no sean molestia. No preocuparnos por las palabras que vamos a decir por si le ofende al otro, dejar que me robes todas mis horas del día. Sigo queriendo que robes las horas de mis días, que te pongas celosa, que me digas cualquier cosa sin pensar. Sigo queriendo todo lo que era un pasado contigo. Volver a los días a los que empezábamos ha hablar a las ocho de la tarde y terminábamos a las diez de la mañana. Volver a sentir que no hay nada ni nadie que pueda separarnos. Sin embargo lo han hecho, pero nunca podrán apagar la llama de fuego que me haces sentir. Ya sabes que donde hubo fuego quedan cenizas, pero aquí hubo fuego, hay fuego y habrá fuego.


Todas las entradas del blog van para Nieves.

                                
                                  Ya sabes, a NY, en un ático